24 octubre, 2006

Televisión

Ah amigos, lo que hacen los amigos. Digo esto porque si no fuera porque Borch se puso tan pesado, nunca me hubiera aficionado tanto a lo que yo considero uno de los pilares básicos de nuestra sociedad actual: Padre de familia (en inglés Family guy, cabe resaltar que realmente significa "un tío familiar", pero lo perdono). Y es que hoy en día hay pocas cosas en la tele que de verdad merezcan la pena, pero Padre de familia es una de ellas. El sarcasmo de Los Simpson, junto al humor irreverente de South Park y ambos mezclados con la crítica más aplastante contra los Estados Unidos, dan como resultado una de las series más graciosas que he tenido el placer de conocer. Sinceramente la recomiendo, y si quereis saber más sobre la serie podéis meteros en Youtube y buscar algo, que os partireis. Yo ya me he bajado todas las temporadas, y os aseguro que son joyitas del humor.

1 comentario:

Jappy dijo...

Un padre obeso, medio retrasado y que no tiene la menor idea de cómo educar a sus hijos, una mujer sufridora aunque extrañamente tranquila, un hijo retrasado por completo que no sabe ni cómo es capaz de respirar, una hija amargada y acomplejada, un bebé cuyos planes de conquista mundial pasan por acabar con esa "mala mujer" que le trajo al mundo y un perro erudito capaz de hablar mejor que cualquiera de la familia...
Perfecto. Y por supuesto, todos son americanos.